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Sarcoma de Ewing: diagnóstico

Si usted o su hijo tienen síntomas del sarcoma de Ewing, deberán hacerse ciertos exámenes y pruebas para estar seguros. El diagnóstico del sarcoma de Ewing comienza con algunas preguntas que le hará el proveedor de atención médica. Le preguntará sobre su historia clínica, síntomas, factores de riesgo y antecedentes familiares de la enfermedad. El proveedor de atención médica también le hará una exploración física.

¿Qué pruebas podrían ser necesarias?

Usted o su hijo pueden necesitar una o más de las siguientes pruebas:

  • Pruebas de diagnóstico por imágenes

  • Biopsia

Pruebas de diagnóstico por imágenes

Las pruebas de diagnóstico por imágenes son lo primero que se hace si el proveedor de atención médica cree que usted o su hijo pueden tener un tumor óseo, como el sarcoma de Ewing.

Radiografías del hueso

Con frecuencia, es la primera prueba que se hace. Para la radiografía, se utiliza una dosis muy baja de radiación para tomar imágenes de los huesos y órganos. Las radiografías permiten ver imágenes del interior del cuerpo. Los proveedores de atención médica pueden ver la mayoría de los tumores óseos en una radiografía e, incluso, pueden determinar si es probable que se trate de un sarcoma de Ewing.

Resonancia magnética

Para esta prueba, se utilizan imanes y ondas de radio para crear imágenes detalladas del interior de las mamas. La resonancia magnética suele ser la siguiente prueba que se hace si se observa algo sospechoso en una radiografía. Allí, se puede definir más claramente las áreas modificadas para ver si el problema consiste en un tumor de Ewing o si se trata de algún otro daño óseo o una infección. En la resonancia magnética se pueden observar detalles del tejido que rodea el tumor, así como el interior del hueso con el tumor.

Biopsia

En los resultados de las pruebas de diagnóstico por imágenes se puede sugerir un tumor óseo. Pero la única manera de estar seguro es tomar una parte del hueso alterado y analizarlo con un microscopio. Esto se denomina biopsia. Hay diferentes formas de hacer una biopsia ósea. Es importante que el proveedor que hace la biopsia trabaje con un proveedor de atención médica que tenga experiencia en el tratamiento del sarcoma de Ewing. Esto es para garantizar que la forma en que se corta la piel o se extrae la parte del tumor no afecte el tratamiento posterior con radiación o cirugía.

Biopsia con aguja

Para este tipo de biopsia ósea, el proveedor de atención médica utiliza una aguja hueca grande. La introduce a través de la piel, dentro del tumor óseo, para extraer una pequeña muestra. Este tipo de biopsia no requiere cirugía. En la mayoría de los casos, permanece despierto, pero se adormece el área. El proveedor de atención médica puede usar una tomografía computarizada para guiar la aguja hacia el lugar correcto. 

Biopsia por incisión

Si el tumor es grande, un proveedor de atención médica podría extraer una pequeña parte a través de un corte (incisión) en la piel. Si el tumor está cerca de la piel, es posible que usted o su hijo reciban medicamentos para adormecerlo. El cirujano adormecerá el área para hacer la biopsia. Si el tumor está bien profundo dentro del cuerpo, es posible que necesite anestesia general. En este caso, se utilizan medicamentos para que se duerma profundamente y no sienta dolor mientras se hace la biopsia.

Biopsia por escisión

Si el tumor es pequeño, un cirujano puede cortar la piel y extirpar todo el tumor. Este tipo de cirugía suele requerir anestesia general. Esto significa que se dormirá profundamente.

Obtención de los resultados de las pruebas

Cuando el proveedor de atención médica tenga los resultados de las pruebas, se comunicará con usted. Hablará con usted sobre otras pruebas que pueden ser necesarias para usted o su hijo si se detecta sarcoma de Ewing. Asegúrese de entender los resultados y lo que debe hacer a continuación.

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